En España cuando una persona acepta un cargo como directivo de una asociación sin ánimo de lucro lo hace de forma desinteresada.
Cuando empiezas a trabajar para una entidad sin ánimo de lucro das lo mejor de ti mismo: quieres aportar conocimientos, mejorar la gestión de la asociación, la vida de los asociados, etc.
A medida que pasa el tiempo la motivación empieza a decaer lo que provoca que los cargos directivos no lleguen a terminar su mandato y mucho menos a presentarse para su reelección.
En promedio, las tasas de rotación en los cargos directivos de las asociaciones aumentan en mayor proporción que las de las empresas con fines de lucro.
¿Qué es lo que provoca el desánimo en los miembros de la Junta Directiva y, en consecuencia, este aumento en las tasas de rotación? A continuación, os dejamos algunas de los motivos más frecuentes.
¿Qué vas a encontrar en este post?
5 razones por las que renuncian los cargos directivos de las asociaciones
1. Cargas de trabajo excesivas.
La mayor parte de organizaciones sin fines de lucro no cuenta con el número suficiente de empleados necesarios para hacer frente a todas las tareas del día a día por lo que, los cargos directivos se ven desbordados por la carga de trabajo.
Dedican una parte importante de su tiempo a realizar tareas administrativas que les impieden centrarse en lo realmente importante: captar recuros y prestar servicio a los asociados.
2. Dificultad de conciliar la vida personal y profesional
En España, la jornada laboral es muy larga lo que provoca que las personas no dispongan de tiempo suficiente para dedicar a la familia y a la gestión de la asociación. Sobre todo, si tenemos en cuenta que muchas entidades necesitan personal disponible incluso los fines de semana.
Esto obliga a muchos gestores a elegir entre pasar tiempo con su familia o dedicarlo a la entidad.
3. Cultura organizacional pobre e inexistencia de visión
No existe una cultura organizacional que favorezca el crecimiento de la entidad, la capacidad de mejora, etc.
No hay una visión de futuro de hacia dónde se quiere llegar con la asociación, se vive al día. Dos de las principales causas de este problema es la falta de personal cualificado y la dificultad para captar recursos.
4. Dificultad para captar recursos
Al contrario que ocurre en Estados Unidos, las empresas españolas no tienen una cultura de colaboración con las organizaciones que prestan servicios dentro de una comunidad muy determinada. Si a esto le sumamos la falta de tiempo y personal esto se convierte en una tarea complicada.
5. Escasa comunicación
La escasa comunicación entre los propios miembros de la junta directiva y con la comunidad de la que forman parte provoca que en ocasiones no se transmita el esfuerzo y tiempo que dedican a la entidad lo que provoca una falta de reconocimiento que termina afectando a los gestores.
Las altas tasas de rotación de los cargos directivos en las asociaciones se verían reducidas con una herramienta de gestión, cucunver, que agiliza las tareas diarias y permite ahorrar tiempo.
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Aquí os dejamos a modo de infografía por qué renuncian los cargos directivos de las asociaciones sin ánimo de lucro.